Cuídala como cuida ella de ti

Un nuevo modelo de ciudad pasa por afrontar el debate sobre la gestión del agua
Publicado en La Opinión-El Correo de Zamora el 8 de octubre de 2019

Con esta invitación a cuidar del agua que nos da vida y nos conforma, comienza el estribillo de «El hombre y el agua» de Joan Manuel Serrat. Hemos vivido unas semanas en la que nuestro estilo de vida y sus consecuencias para el medioambiente han estado en el centro del debate público. A las movilizaciones por la «emergencia climática» se va sumando el interés creciente en que, desde la política local, promovamos cambios para reducir nuestra huella ecológica y mejorar la sostenibilidad de nuestras vidas.

Estas demandas de la sociedad civil no deben de ser tratadas aisladamente ni  hacer, como vulgarmente se dice, coger el rábano por las hojas. Por el contrario, deben de servir de estímulo para plantear un modelo de ciudad que llevamos postergando desde hace tiempo. Este modelo no va a surgir de la noche a la mañana, ni nadie, desde los partidos o desde las instituciones, cuenta con la varita mágica necesaria para obrar ese milagro. Solamente será posible alcanzarlo con el concurso de todos. La opinión de las asociaciones de vecinos, de agrupaciones civiles, de colegios profesionales, de partidos políticos o de sindicatos debe de ser escuchada, estableciendo cauces de comunicación permanentes y abriendo el modelo de ciudad para los próximos años a la participación ciudadana, consiguiendo dar voz a las vecinas y los vecinos de Zamora en la construcción de una ciudad de todos y para todos.

En esta línea hemos comenzado nuestra andadura en esta nueva legislatura el Grupo Municipal del PSOE en el Ayuntamiento de Zamora. En el pasado Pleno Municipal presentamos una moción con varias iniciativas para reactivar y facilitar la participación ciudadana y, concretamente, propusimos que se abriera el debate sobre el futuro de la gestión del agua. Solicitábamos que, aprovechando la prórroga de nueve meses en los contratos de abastecimiento y de saneamiento, se explorasen alternativas para una gestión mixta o pública de las aguas de la ciudad. Nos parece razonable que, con un contrato que viene prorrogándose desde hace cincuenta años y tratándose de un bien tan esencial como es el agua, se estudien otras alternativas, se pidan informes y se genere un debate público e informado sobre las consecuencias de las diferentes opciones.

Nuestra propuesta no pretende imponer ningún modelo preconcebido de gestión del agua, sino  estimular un debate que no puede demorarse y que, dentro de unos meses, puede llegar tarde. La experiencia reciente de procesos de remunicipalización del ciclo del agua en más de 250 municipios europeos y en más de treinta ayuntamientos españoles (muy distintos en tamaño, ubicación, características y color político), nos invita a ser optimistas sobre las posibilidades de encontrar una fórmula adecuada a las particularidades de nuestra ciudad, aunque sabemos que no será fácil y que tendremos una ardua tarea por delante.

Los grandes contratos no deberían de efectuarse de espaldas a los ciudadanos, de la misma manera que los servicios públicos no deberían de depender de intereses privados. Es una cuestión básica sobre la que es preciso reflexionar. Si queremos que la participación ciudadana deje de ser una asignatura pendiente es imprescindible que cobre protagonismo en asuntos que afectan de manera directa al interés general de los zamoranos. 

Es cierto que la defensa de los servicios públicos forma parte del ADN de cualquier progresista, pero no es menos cierto que no es posible un modelo de ciudad inclusivo, accesible, igualitario y respetuoso con el medioambiente y, en definitiva, progresista, sin que la participación ciudadana deje de ser una declaración de intenciones y se convierta en un compromiso a corto plazo.

Lamentablemente estas propuestas no están teniendo el efecto deseado y nos estamos encontrando con el desinterés y la desconfianza del equipo de Izquierda Unida. Seguiremos insistiendo, aunque lo más preocupante no es el rechazo, sino sus consecuencias. Si no alimentamos el debate y la participación en el modelo de ciudad, muchas inversiones públicas y privadas correrán el riesgo de malograrse y de no reportar el beneficio que de ellas se espera. 

Aún están a tiempo de abandonar el rodillo de la mayoría absoluta y de convertirse en cauce de participación, pero el tiempo es oro y, como el agua, nunca se detiene. 

David Gago Ruiz
Portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Zamora

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